Lectores de Genial contaron sobre las ofensas de la infancia que dejaron una marca indeleble para toda su vida
“Las ofensas de los niños son las más fuertes y se recuerdan por más tiempo que otras, porque los niños se ofenden con el corazón y los adultos, con la mente. La mente es capaz de superar la ofensa, el corazón no. Quedan cicatrices que no se pueden alisar como pliegues en un tejido”. Esta es una cita del libro Coco Chanel. Su vida contada por ella misma, donde explica perfectamente el hecho de por qué es tan difícil olvidar el castigo injusto, la desconfianza, la traición, el ridículo o la crueldad por parte de los adultos.