Manu Martínez: Yo no hago lo mismo que mi papá

Viernes 27, en la mitad de la tarde. A dos días de la muerte de Diego Armando Maradona, la joven cantautora Manu Martínez lamenta la coincidencia de un hecho como ese con la salida de Diecinueve, su debut absoluto en formato disco.

Su padre, Andrés Ciro Martínez, es responsable de una de las mayores películas musicales dedicadas a Diego y el ánimo no es el mejor. “Verlo tocando la armónica y emocionándose al final fue súper fuerte, así que me pegó”, cuenta sobre el cierre de una charla que, en rigor, repasa sus comienzos en la música y se aventura en las 12 canciones que componen este primer disco, que incluye joyas como Vuelve o Fotos del ayer, la primera que mostró al mundo.

“Arranqué a armar las primeras canciones a las 12, empecé a componer con mi mamá. De ahí en adelante hice muchísimas canciones pero siempre fui muy tímida y me costó mucho mostrarlas. Mi viejo me pedía que se las muestre y yo no quería”, dice Manu, quien debutó cantando en Cosquín Rock 2014 sola frente a una multitud con apenas 14 años, previa invitación de su papá.

“Un día empecé a ensayar con una banda y lo llamé para que venga a escuchar. Ahí me dijo ‘che, ¿no querés hacer un disco?’ y yo le dije ¿sí, obvio’”, recrea a sólo dos años de haber iniciado este proyecto con nombre propio.

“Me junté con Nico Cotton, armamos unas maquetas y me encantó el trabajo que hizo”, cuenta sobre el proceso de producción de Diecinueve, que remite a Adele desde su título. “Me parece que aportó todo lo que necesitaban los temas y entendió perfectamente lo que yo quería para las canciones”, asegura orgullosa sobre su trabajo con el productor.

“Hay temas que hice a las 12, otros a los 15 y otros a los 19. El disco se llama así porque lo soñé en mi último año de colegio secundario, cuando no sabía si estudiar o hacer música. Al final terminé haciendo las dos cosas porque estudio Letras en la UBA”, reflexiona Martínez, autora de una de las canciones más conocidas de Ciro y Los Persas, Luz.      

Con foco en su guitarra acústica y su voz, las canciones de Martínez beben de fuentes varias y se alejan del sonido normalizado del pop con ritmos latinos y elementos del hip hop. Por el contrario, con links directos a Alanis Morissette o a la Shakira más fogonera, Martínez se identifica con el prototipo de cantautora con algo para decir, sin miedo a explorar diferentes ritmos junto a su banda.

–¿Quiénes son tus referentes más inmediatos?

–La primera y más importante referente es mi mamá (Carolina de la Presa). Me encantaría en algún momento sacar un disco con sus canciones. Después Julieta Venegas me encanta, y me encantan las letras de mi viejo. En el disco intenté buscar eso: letras de amor pero también otras que hablen de otras cosas, que es algo que me gusta mucho de mi papá. Pero en cuanto a gustos tengo una mezcla de todo, escucho desde Pappo hasta Katy Perry, Coldplay o Natalia Lafourcade, soy fan de muchos artistas.

–¿Cómo te llevás con las expectativas que genera la asociación obvia con tu papá?

–Mi viejo últimamente me estuvo acompañando un montón. Él me ayudó a elegir los temas para el disco. Capaz había temas que con Nico decíamos que no tenían que entrar y el decía “no, este tema está buenísimo, tiene que entrar”. Así que siempre tratando de escucharlo porque es en parte mi ídolo, es un genio. Con los fans y eso no es fácil, siempre hay más presión. Supongo que vienen a verte y esperan que hagas lo mismo que hace tu papá, o que esté igual de bueno. Pero yo estoy segura con lo que hago. Yo no hago lo mismo que mi papá y eso es algo que suelo avisar. Tampoco busco hacer lo mismo que él, aunque sí me encantaría que mis canciones estén igual de buenas (risas).

–¿Te imaginás desarrollando aún más ese vínculo artístico entre ustedes?

–Sí, me encantaría. Uno de mis sueños es poder grabar un tema cantando con mi viejo y que la letra esté escrita por los dos. O por uno, pero los dos cantando.

Manu Martínez en un fragmento del videoclip de “Fotos del ayer”, la canción que abre su primer disco (Gentileza prensa).