Mario Pereyra y su relación con la música: Un olfato único para profetizar éxitos e impulsar artistas

Mario Pereyra tenía intuición, olfato. Y esa virtud no sólo lo volvía un ineludible a la hora de pensar la agenda sociopolítica sino también una fuente de consulta permanente para la industria musical argentina. 

Claro que para fortalecer este último perfil talló su amor por el tango y el folklore en particular y por todos los géneros con resonancia popular en general. 

Talló una pasión que cultivó desde niño, desarrolló de joven en el umbral de la adultez, ya trabajando en radios sanjuaninas de alcance provincial, y que no descuidó en ningún momento como líder indiscutido de la radiofonía cordobesa al frente de Cadena 3. 

Productores, artistas consagrados, otros en ascenso y difusores de sellos tenían trato regular con Mario Pereyra, por cuanto sus consejos y puntos de vista resultaban determinantes. 

“Tengo (tenemos) mucho que agradecerte, muchos motivos para recordarte y muchísimos más para extrañarte”, posteo Abel Pintos en la mañana de este domingo, como para certificar que Pereyra apuntalaba carreras que se insinuaban masivas. 

Carlos “Mona” Jiménez fue en esa misma sintonía al despedir al conductor de Juntos: “Fuiste un pilar fundamental para la música popular de Córdoba y sin dudas mi carrera no hubiera sido lo mismo sin tu apoyo incondicional”.

Y Soledad, a su turno, destacó el carácter federal que le imprimía a sus iniciativas. 

“¿Quién hablará con tanto entusiasmo del folclore,  de los festivales, de la música popular? ¿Quién mencionará con tanto cariño nuestro interior?”, tipeó la cantante santefesina. 

“Hiciste grande a tu radio @cadena3com desde el federalismo. Fuiste único. Será difícil esta ausencia. Mi agradecimiento es eterno. Sin dudas, lo diste todo hasta el final. Donde quiera que estés, gracias Mario. Te voy a extrañar”, cerró la artista, quien además tuvo la gentileza de escribir una nota de opinión para complementar esta página. 

Mario Pereyra logró que una industria siempre centralista abra una ventana para ver al interior, para certificar que allí había un mercado potente que él podía ayudar a explotar. 

Así, las jornadas de promoción de discos y conciertos se planificaban con epicentro en Juntos. “He ido con cientos de artistas. Artistas de primer nivel, artistas que estaban empezando, la puerta siempre estuvo abierta, siempre tuvo el corazón abierto para mí. Nos sentábamos en su oficina al fondo de la radio  y me decía ‘haceme escuchar y vemos qué organizamos’. La palabra suya era importantísima”, recuerda Oscar “Bocha” Neri, hoy en Universal Argentina pero con varias décadas de trayectoria en otros frentes del sector disquero. 

“Siempre me dio una mano… Como a todos. Me dio una mano cuando arranqué, cuando fui creciendo y me la fue dando ahora. Un señor. Ya no hay más como él. Un tipo que amaba la música… Siempre tenía la palabra sabia y ponía las cosas en tiempo. ¡Esperemos un poquito que esto va a andar’, te decía cuando vos querías una definición a las apuradas. Ya no hay más conductores así. Mario es el último mohicano”, amplió. 

“Hay que tener en claro que él hacía la radio que nosotros conocíamos y ya no existe –amplía-. Una radio distinta. Uno apelaba a cosas… Ya desde afuera (España, México) te decían  ‘tenemos que ir a lo de Mario Pereyra’. No hay más, se acabó. No sé si nosotros, la gente de la música, volverá a tener un interlocutor igual. No lo creo”. 

“Queda la nueva radio, las nuevas generaciones… Pero Mario tenía esa cosa incalculable, una canción difundida por él tenía un rebote tremendo y un sí suyo no tenía paralelo”, concluyó Neri. 

“Siempre nos aconsejó”, dice Martín Pampiglione, de Los Caligaris

“Cuando éramos unos pibes y sólo habíamos grabado un demo, se lo llevamos a su oficina y nos dio su punto de vista. Desde entonces, nos apoyó siempre. Tuvimos la suerte de estar en la mesa de Juntos, hacer varias entrevistas y de acompañarlo en varias celebraciones populares”, sumó el cantante. 

Con esta foto despidieron Los Caligaris a Mario Pereyra. (Twitter @LosCaligaris)

Su hermano Diego, también miembro de Los Caligaris, recuerda que le regaló un saco de luces, más de payaso que de torero, y no duda en destacar a Mario como un sostén del proyecto, tanto en términos humanos como artísticos. “Un tipo increíble, un fuera de serie de la radiofonía”, define. 

Además de sus análisis minuciosos en cuanto a perfiles artísticos y estrategias de difusión, Mario Pereyra también solía inmiscuirse en la producción de espectáculos masivos. Más específicamente, diseñaba las fiestas de Cadena 3 en el estadio Mario Alberto Kempes, en complementariedad con un equipo liderado por Pía Arrigoni

“Mario confío en nosotros para que dos veces al año nos ocupáramos de su niño mimado: las fiestas de Cadena 3 en el Kempes (la del Día del Niño, la de Fin de año). Comenzaba con la previa en las reuniones en su oficina, donde levantaba ese teléfono mágico y conseguía  lo imposible”, rearma Arrigoni para VOS

“Habían sido tantos los artistas que catapultó a la fama, que nadie se negaba a participar. Cada año la fiesta se superaba a sí misma y era indisimulable su orgullo de regalársela gratuitamente a la gente de su Córdoba adoptada. Se le notaba la emoción de sus ojos”, asegura Pía, al tiempo que rescata que Pereyra “era un tipo que sabía escuchar y asimilar. 

“Nunca tuvimos un conflicto, siempre iba para adelante beneficiando a los que más necesitaban. Lo he visto estar presente en los detalles más mínimos y nos daba la felicitación sincera después de cada evento. Mario permanecerá por siempre en los oídos de los cordobeses. Se fue en el día de todos los Santos, y eso fue para muchos”, cierra la productora. 

 

Con esta foto despidieron Los Caligaris a Mario Pereyra. (Twitter @LosCaligaris)