El inestable equilibrio del Presenta Trío: “Tratamos de ser lo más desprejuiciados posible”

Suena una pegadiza intro en medio tiempo con guitarra, bajo, batería y un colchón de sintetizadores. Podría ser el comienzo de una canción de una banda pop/rock bien radial, pero no: es el comienzo del tema que abre El inestable equilibrio, el cuarto disco de estudio del Presenta Trío, el grupo cordobés que desafía límites musicales hace casi 20 años.

“Dónde, decime dónde”, canta Maxi Bressanini sobre ese sonido casi electrónico, dando la certeza de que lo que se escucha es una versión de Baguala del desengaño, el tema de Jacinto Piedra que más acá en el tiempo Raly Barrionuevo incorporó casi como propio en su repertorio. Entonces, cierto desconcierto inicial se convierte en certeza: el trío que completan “Bachi” Freiría y Marco Martina lo hizo de nuevo, llevando las canciones folklóricas a lugares impensados. 

Siete años pasaron desde la salida del anterior álbum (Tres), en el que la banda se animaba a publicar por primera vez sus composiciones propias. En el medio, celebraron sus 15 en Cocina de Culturas con todos los chiches y vestidos de fiesta incluidos, debutaron en el Festival de Cosquín y prepararon un nuevo material con máximo nivel de detalle en cuanto al sonido e invitados ilustres como Emilio del Guercio, Fernando Cabrera, Suna Rocha y el Dúo Coplanacu, además de mostrar una maduración compositiva.

“Fue un proceso largo, pero muy gratificante. Trabajamos de formas que no lo habíamos hecho nunca y creemos que se nota en el resultado final”, introduce Bressanini. 

Luego amplía un concepto que le había adelantado a VOS el año pasado: “Usamos el estudio de grabación como un laboratorio, donde la experimentación estaba a la orden del día y eso nos llevó por caminos maravillosos. Encontramos ranuras en las canciones donde florecían historias, emociones nuevas, y eso lo explotamos al máximo”.

–Ya desde su tapa, se nota ese contraste entre diferentes mundos: está Michael Jackson, la naturaleza, un drone, la lucha de las mujeres… ¿Presenta Trío es un poco todo eso? ¿Cómo los atraviesa este presente que parece tan apocalíptico?

–El inestable equilibrio refleja en gran parte cómo vemos al mundo que nos rodea, con tanta información, con esas polaridades, con ese aparente caos. Pero cuando uno puede transitar esos universos con flexibilidad, encuentra que hay siempre una fuerza que compensa lo que aparentemente está desequilibrado. Nosotros nos debatimos todo el tiempo entre esos mundos, nos bamboleamos de un lado al otro y en ese pendular, sin darnos cuenta, estamos en equilibrio, ese ida y vuelta no es más ni menos que aprendizaje. Nuestra música es ese camino zigzagueante y no le tenemos miedo a esa experiencia. Es ese apagar de luz, para que luego al prender la lamparita, quedemos encandilados. Perdón, he sido nuevamente padre hace poco, duermo casi nada, y la cuarentena me hace desvariar y coquetear con el delirio místico, jaja.

En este cuarto disco de Presenta Trío, hay versiones realmente jugadas como La rosa es un milagro, que popularizó el Dúo salteño, en clave jazz de salón con exquisitos arreglos de vientos de Nicolás Ocampo; Milonga Triste, de Homero Manzi, con un toque bien dark (es más, podría ser cortina de la serie alemana), la voz de Cabrera desde el más allá, el bandonéon “piazzoleano” de Pablo Jaurena y unas bases de Fede Flores; La añera, de Yupanqui, llevada a un reggae bien power o Que ves el cielo, de Invisible, en el camino inverso, bien folk, con las enormes voces de los Copla y el sutil acompañamiento del bombo legüero. Seguramente a Spinetta le hubiera gustado.

La gran pregunta: ¿qué tiene que tener una canción para pasar por el tamiz del Presenta Trío? “Una simple condición: nos tienen que emocionar, tiene que abrir una puertita. Desde ese lugar, empezamos a jugar sobre la obra, tratamos de ser lo más desprejuiciados posible y permitimos que las músicas que nos habitan florezcan e intervengan la canción. No es un proceso racional, sino un dejarse llevar y que la batuta la dirija el corazón. Todo esto no implica que no hay trabajo. Una vez hecho los arreglos, se pulen constantemente, y al tocarlos en vivo aparecen nuevos arreglos que embellecen la canción”, dicen. 

En vivo y con humorEn tiempos de pandemia, es imposible pensar en una presentación en vivo tal como la conocíamos. Entonces, a los integrantes del grupo se les ocurrió armar una transmisión en vivo cada miércoles, a las 22, por sus redes, en las que van presentando cada una de las canciones con algunos de los invitados y utilizando una estética de parodia de un magazine televisivo. Ya pasaron tres y, teniendo en cuenta que el disco tiene 14 canciones, alrededor de octubre estará todo presentando y allí se subirá completo a las plataformas.   

“En esto de reinventarnos y con la imposibilidad técnica de tocar juntos para hacer vivos online, surgió la idea de presentar las canciones así: un delirio convenció al otro y salió El inestable programa del P3, un pseudoinformativo lleno de clichés, estereotipos y jugarretas comunicacionales. No sabemos si somos graciosos, no estudiamos actuación, pero nos divertimos un montón y eso nos hace sonreír cuando vamos a dormir, o en mi caso, a intentar dormir”, cuenta Bressanini entre risas.

-Esta idea de deformar temas reconocidos seguramente le debe haber traído todo tipo de reacciones de escuchas y público. ¿Hay algo que no se permita o algún límite para el Presenta Trío? ¿Hubo algún autor o cercano que les haya hecho una devolución inesperada?

-Lo único que no nos permitimos es hacer canciones que no nos emocionen, no importa el género ni el autor, la obra nos tiene que mover alguna fibra. ¿Cómo emocionar a alguien si primero no nos emocionamos nosotros? En cuanto a devoluciones, hemos tenido hermosas experiencias con los autores de las canciones, nos hemos cruzado en un toque nuestro en vivo con Ramón Ayala el cual nos manifestó que le había gustado mucho nuestra versión, igual con el querido Pancho Cabral, Marcelo Perea… Hemos tocado por todo el país y en esas giras nos cruzamos muchas veces con los creadores de las canciones, y siempre nos manifestaron su agrado.

Para cerrar el concepto, el cantante rescata una anécdota que sirve para graficar mejor la respuesta anterior. “Estábamos en una conferencia de prensa en Buenos Aires por nuestro segundo disco y algunos periodistas cuestionaban nuestra forma de interpretar la música popular De pronto del fondo de la sala viene caminando el gran Raúl Carnota, toma el micrófono y les dice: ‘Les hacen las mismas preguntas que a mí hace 20 años’. Luego les dio una cátedra sobre la música popular y su continua transformación”.