Una pareja retira la demanda que originó un fallo judicial sobre embriones congelados en Alabama
MONTGOMERY, Alabama, EE.UU. (AP) — Un juez desestimó la semana pasada una demanda por homicidio culposo que llevó a la Corte Suprema de Alabama a dictaminar que los embriones congelados son “niños extrauterinos”, una decisión que atrajo la atención nacional y detuvo temporalmente los servicios de fertilización in vitro en el estado.
Una pareja, que presentó una demanda por homicidio culposo por la destrucción accidental de su último embrión congelado, solicitó retirar la demanda. Un juez concedió la solicitud y desestimó el caso el viernes, según los registros del tribunal estatal. Otras dos parejas habían retirado demandas similares en agosto.
La orden judicial no detalló la razón para retirar la demanda ni si se había alcanzado un acuerdo. Trip Smalley, un abogado que representa a la pareja, no respondió de inmediato a un correo electrónico y un mensaje telefónico en busca de comentarios.
Los embriones de las tres parejas fueron destruidos en 2020 cuando un paciente del hospital entró en el área de almacenamiento. El paciente abrió el contenedor, tomó embriones y los dejó caer al suelo.
La Corte Suprema de Alabama dictaminó en febrero que las tres parejas podían presentar reclamaciones por homicidio culposo por la destrucción de los embriones. Los jueces, que citaron el lenguaje antiaborto en la Constitución de Alabama, dictaminaron que una ley estatal de 1872 que permite a los padres demandar por la muerte de un hijo menor, “se aplica a todos los niños no nacidos, independientemente de su ubicación”.
La decisión se convirtió en un punto crítico en el debate nacional sobre el aborto y generó preocupaciones de responsabilidad legal para las clínicas de fertilidad que crean, almacenan y trabajan con embriones congelados. Tres grandes proveedores de FIV en Alabama detuvieron sus servicios a raíz de la sentencia. Ante la reacción pública contra la decisión, los legisladores de Alabama aprobaron una legislación de inmunidad para proteger a los médicos de demandas y reanudar los servicios de FIV en el estado.
La pareja, que había recurrido a la FIV para tener hijos, dijo en su demanda de 2021 que el accidente destruyó su último embrión congelado, que estaba almacenado en la instalación. Aunque habían decidido no implantarlo, “consideraban este embrión un ser humano o una vida”, escribió su abogado en la demanda.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
