Mientras miras esos ojos de videotape: “La canción sin fin”, un podcast sobre Charly García que aleja las pantallas

El universo del podcast es casi tan amplio como aquello que atraviesa su origen y su desarrollo reciente: las posibilidades del sonido como un componente narrativo en sí mismo, que no depende pura y exclusivamente de la palabra hablada para imponerse en un mundo de contenidos coptados por el poder de la imagen.

En ese contexto, La canción sin fin –novedad de Futuröck de septiembre- emerge como una especie de cita ideal para quienes no estén al tanto de las distintas variantes del formato.

Con la excusa de repasar tres discos emblemáticos en la carrera de Charly García –sus tres primeros solistas: Yendo de la cama al living, Clics modernos y Piano bar, grabados sucesivamente en 1982, 1983 y 1984-, el pianista y docente Sebastián Furman desarrolla seis capítulos en los que disecciona el contenido musical de esos álbumes aportando teoría y ejemplos con su instrumento. Pero además, y de la mano de una edición impecable en la que también colabora Antonio Boyadjian, navega sus contextos de producción y aporta varias anécdotas memorables.

Más allá de los detalles jugosos para cualquier escucha interesado –conocedores de la obra de García o “fans” del rock argentino-, lo interesante de La canción sin fin es cómo logra mostrar algunos de los secretos compositivos de uno de los próceres de la música argentina del siglo 20. Todo a partir de un análisis tan exhaustivo como apasionante, capaz de contagiar entusiasmo de la mano de una combinación infalible: información fidedigna y una lectura interpretativa realmente inspirada.

El secreto detrás de una factura tan precisa y estimulante es uno solo: horas y horas de escucha, disfrute e investigación detrás de tal o cual parte, de esos acordes “suspendidos” que se citan una y otra vez y de cualquier tipo de referencia hecha por García en sus mordaces y punzantes líricas.

En un momento histórico en el que el teléfono celular o la computadora representan trampas para nuestra capacidad de sostener la atención fuera de las pantallas, el ejercicio de sumergirse en la música de tres obras cumbres de la historia de nuestro rock es una invitación a viajar con los ojos cerrados. Y también a redescubrir un repertorio que, de la mano de Furman, confirma su entidad de patrimonio sonoro para nuestro inconsciente colectivo.

“La canción sin fin” repasa tres de los discos más emblemáticos de Charly (Twitter).