Dabove y la derrota con River: por qué salió Alarcón y la sensación de “amargura”
A pesar del gran esfuerzo realizado por Instituto, el equipo cordobés no pudo contra el poderío de River y cayó derrotado 3-2 en el Monumental de Alta Córdoba. Tras el partido, el director técnico del conjunto albirrojo, Diego Dabove, habló con la prensa y expresó su sentir sobre el encuentro.
“Hay una sensación de amargura por una derrota que se escapa por detalles. Ante un equipo de gran jerarquía. Nos invade la amargura y la tristeza. Estuvimos a la altura en lo actitudinal”, fueron las primeras palabras del entrenador.
Dabove reconoció la superioridad del rival, pero destacó la entrega de sus dirigidos: “Hicimos un montón de cosas buenas. La entrega fue extraordinaria. Los primeros 20 minutos fueron muy buenos. En general más allá de la bronca hubo aspectos que recuperamos y habíamos perdido”.
El DT también se refirió a la elección de Nicolás Dubersarsky como capitán del equipo: “Dubersarsky fue capitán por su profesionalismo y seriedad. Será capitán durante mucho tiempo. Tiene ascendencia con el grupo. Me parecía que le correspondía”.
Sobre la ausencia del capitán habitual, Fernando Alarcón, Dabove aclaró: “No guardamos nada. Pensamos que este era el mejor 11. Estaban todos aptos (por Alarcon)”.
Si bien el entrenador reconoció el buen partido de su equipo, no ocultó la preocupación por el momento que atraviesa Instituto en el campeonato: “Sabemos que no venimos bien desde lo futbolistico. Que estamos dejando puntos importantes. Estamos en un bajón. Hoy estuvimos a la altura pero si los anteriores partidos”.
Dabove sabe que no hay tiempo para lamentos, ya que el próximo lunes Instituto enfrentará a su clásico rival, Belgrano: “Hay que reacomodarse porque el lunes tenemos el clásico”.
El partido contra River fue un fiel reflejo del presente de Instituto. El equipo mostró actitud, pero no le alcanzó para conseguir un resultado positivo. La derrota ante el Millonario dejó al equipo albirrojo en una situación complicada en la tabla de posiciones pensando en las copas internacionales.
Ahora, Dabove y sus dirigidos deberán enfocarse en el clásico ante Belgrano, un partido clave para levantar el ánimo y comenzar a revertir la situación actual del equipo.