Talleres y un empate en Rosario que fue intenso y polémico: la crónica del 2-2 por la Liga Profesional

El 2-2 de Talleres ante Rosario Central fue el partido posterior a la rotura de lanzas de la directiva contra la AFA de Claudio Tapia y de los cuatro o cinco árbitros “serviles” que envían a equipos como la “T” que son críticos a la gestión y de los que habló Andrés Fassi en la explosiva conferencia del lunes. La misma a la que adhirió el presidente Javier Milei y equipo, que ya sostiene su propia lucha por entrarle a la AFA con las Sociedades Anónimas Deportivas.

Lo primero que hay que señalar es que este antes y después con Talleres yendo a fondo en escritorios afistas y penales, cambió su manera de vivir los partidos. Arrancan mucho antes y terminan mucho más que allá de los 90 minutos.

La previa del partido fue distinta a cualquiera, el desarrollo del juego se verá afectado por la susceptibilidad despertada en todo Talleres que se sentirá perjudicado como ayer. No hablar de las evaluaciones posteriores, que contendrán más un análisis arbitral más que del juego albiazul y del rival de turno.

Antes del juego, se conocieron declaraciones de Ricardo Caruso Lombardi (está enfrentado a Tapia y a los jueces desde que dirigía a Belgrano) levantando sospechas en torno a lo que iba a ser su arbitraje en Rosario por ser el “hijo” de “Chiqui” y para que Fassi empezara a pagar el precio de haber denunciado a Andrés Merlos por agresión, en AFA (lo puso a dirigir Gimnasia LP-Tigre) y en la justicia penal, y por perjudicarlo ante Boca, en Copa Argentina.

Casi al mismo tiempo, se conoció la opinión de Fernando Espinoza, uno de los árbitros que ya supo ser cuestionado por la “T” y que dijo que sintió afectado por las declaraciones de Fassi, además de que dentro del fútbol no lo apoya nadie de la dirigencia.

¿Durante? La reacción de Alexander Medina, que fue expulsado después del penal que le hizo Damián Martínez a Gastón Benavídez, lo que le hubiera dado la chance de ganar el juego. El juez hizo seguir sin ir al VAR, tal como lo había hecho en la jugada del penal que determinó el 2-1 parcial por falta de Ulises Ortegoza a Enzo Copetti y la expulsión del volante por doble amoinestación.

¿Más? El escrito de Marcos Portillo sobre la hora insultando directamente por su Instagram al juez del partido. “Sos un chiste Falcón, la p… que te p…”, fue el texto de la historia del volante albiazul que se había quedado afuera del juego de ayer por haber llegado al límite de cinco amonestaciones. ¿Cómo será con Racing? ¿Qué juez enviarán ante River y Belgrano? Mientras tanto, el primer equipo quedó sexto a seis puntos del líder Vélez.

En el medio, hubo un partido que Talleres arrancó ganando desde el vestuario y que, luego, justificó desde el juego. Botta conductor, sociedades importantes con Depietri (novedad) y Galarza, la incorporación de Ortegoza; presión alta y post pérdida, transiciones rápidas y salidas desde abajo. Un equipo bien intenso, a lo Medina, que el rival también leyó. Se acomodó para hacer un juego directo con Malcorra y Campaz.

Dos regalos de Talleres cambiaron todo: Girotti le cometió penal a Damián Martínez y el VAR mostró el de Ortegoza a Copetti. Talleres quedó 1-2 abajo y con 10 por la doble amarilla al volante. Medina dispuso cinco cambios siendo los de Blas Riveros y Cristian Tarragona lo que más resultado le dieron. El ex Platense anotó el 2-2, tras una escalada del “Sicario” Portillo. Luego, quedó tiempo para un par de ataques más y el reclamo por el penal a Benavídez. Sufrió para empatar cuando lo tenía todo para ganar.